Michelle Vasco es una profesional meticulosa y analítica, que ejerce su profesión con un ojo agudo para los detalles y una mente siempre enfocada en la resolución de conflictos. Su pasión por el arbitraje nace de su amor por los desafíos y el alto nivel de formación requerido en esta área del derecho.

Desde su incorporación a Robalino, ha demostrado su capacidad para manejar casos complejos y desafiantes, incluyendo la defensa de una de las mayores prestadoras de servicios del mundo en un caso de arbitraje internacional contra una entidad estatal ecuatoriana.

Cuando no está trabajando, Michelle mantiene su espíritu activo y creativo bailando, practicando pilates, cocinando y leyendo.